Estados Unidos promoverá una nueva normativa para garantizar el uso más seguro de la inteligencia artificial.
Joe Biden, el presidente de Estados Unidos, firmará una orden ejecutiva que permitirá una mayor supervisión de la seguridad en los sistemas de inteligencia artificial, con el objetivo de mitigar los riesgos asociados a esta tecnología.
De acuerdo con la información proporcionada por la Casa Blanca, estas medidas representan el “conjunto de acciones más robusto implementado por un gobierno a nivel mundial”.
Bruce Reed, el subjefe de gabinete, indicó que este decreto de rango legal marca el “próximo paso” en una estrategia “agresiva” que busca abordar los desafíos y aprovechar los beneficios de la inteligencia artificial.
Esta regulación surge después de que, en julio, 15 de las principales empresas tecnológicas del país, incluyendo Amazon, Google, Meta y Microsoft, acordaran adoptar medidas de seguridad propuestas por la Administración Biden en relación con el desarrollo de la inteligencia artificial.
La orden ejecutiva, que Biden presentará en la Casa Blanca el documento que incorpora disposiciones destinadas a proteger la privacidad, mejorar los derechos civiles, resguardar a los consumidores, respaldar a los trabajadores y fomentar la innovación, entre otros aspectos.
Dentro de las medidas contempladas se incluye la exigencia de que los principales desarrolladores de inteligencia artificial compartan con el gobierno de Estados Unidos los resultados de sus pruebas de seguridad y otra información considerada “crucial”.
Según la Ley de Producción de Defensa, las empresas que desarrollen sistemas que puedan representar un riesgo significativo para la seguridad nacional, la seguridad económica nacional o la salud pública deberán notificar a la administración antes de poner a prueba dichos modelos.
Estas medidas buscan asegurar que los sistemas de inteligencia artificial sean “seguros y confiables antes de su divulgación por parte de las empresas”.
El Instituto Nacional de Estándares y Tecnología establecerá estándares “rigurosos” para las pruebas de seguridad, y el Departamento de Interior los aplicará en sectores “fundamentales”.
Además, los Departamentos de Energía e Interior se encargarán de supervisar las posibles amenazas de los sistemas de inteligencia artificial en infraestructuras críticas y los riesgos en los campos químico, biológico, radiológico, nuclear o de ciberseguridad.
La normativa también incluye medidas para prevenir la creación de “materiales biológicos peligrosos” y abordar el fraude y el engaño mediante el uso de la inteligencia artificial, estableciendo la obligación de etiquetar claramente el contenido generado por esta tecnología.
La orden ejecutiva también pondrá en marcha un programa para que la inteligencia artificial identifique y corrija vulnerabilidades del software. Finalmente, se desarrollará un memorándum de seguridad nacional que aborde el uso ético de la inteligencia artificial por parte de las fuerzas armadas y los servicios de inteligencia.
El funcionario de la Casa Blanca explicó en una conferencia con periodistas que estas son las medidas más amplias tomadas para proteger a los estadounidenses de los posibles riesgos asociados a la inteligencia artificial.
Asimismo, señaló que Estados Unidos está colaborando con otros países para lograr compromisos multilaterales y una aproximación “armonizada” al control de la inteligencia artificial. Sobre este tema, anticipó que esta misma semana se darán a conocer algunos avances, y recordó que el martes la vicepresidenta, Kamala Harris, viajará al Reino Unido para participar en una reunión sobre inteligencia artificial, donde pronunciará un discurso sobre la posición estadounidense.
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Director General del Ecosistema Digital El Valluno Medios, Docente y Periodista, Maestro Líder formador de Maestros en competencias TIC.